La menopausia es el cese permanente de la menstruación y tiene correlaciones fisiológicas. La disminución en los niveles de las hormonas estrógeno y progesterona producen cambios importantes en la mujerdurante la menopausia. El estrógeno ayuda a la buena salud de los huesos y a que las mujeres mantengan un buen nivel de colesterol en la sangre, que al disminuir en la menopausia pueden verse afectados. Los síntomas de la menopausia son los siguientes: Sofocos y/o escalofríos. Se estima que entre el 75% y el 85% de las mujeres que transitan la menopausia sufren sofocos. Los sofocos son una reacción del cuerpo a la disminución del estrógeno. Sudoración nocturna y trastornos del sueño. Aceleración del ritmo cardíaco. Períodos menstruales irregulares. Sequedad vaginal. Puede producir cierto dolor y molestia cuando se mantienen relaciones sexuales. Pérdida del pelo y aumento del vello facial. Debilidad del pelo. Es común la caída y rotura del pelo. Mareos, aturdimiento y pérdida del equilibrio. Aumento de peso. Principalmente aumento de la grasa abdominal y dificultad para eliminar el peso adquirido. Incontinencia. Aumento de alergias. Cambios en el olor corporal. Dolor en las mamas. Dolor de cabeza. Dolor en articulaciones, músculos u tendones. Problemas de encías. Problemas digestivos y dolores gastrointestinales. Hormigueo en las extremidades. Picazón en la piel. Osteoporosis. Pérdida de calcio en la estructura ósea.
